SATAN ha lanzado su quinto disco de estudio: Cruel Magic (2018), en una renacida carrera que volvió a tener reflectores en 2013.
Sacados del olvido en una reunión en el Keep It True Festival, la enorme ovación del público fue suficiente para que la banda volviera a componer música.
SATAN guarda enormes cualidades: en primer lugar, mantienen la misma alineación desde 1983, cuando lanzaron su debut: Court in the Act.
Sólo en el segundo disco: Suspended Sentence (1987) cambiaron de vocalista; pero de ahí en fuera, Brian Ross siempre ha sido la voz de SATAN.
Ésta es la segunda gran cualidad de SATAN: la voz de Brian Ross, pues ha logrado mantenerse exactamente igual a través de los años; aunque su técnica no huye de agudos, sólo son un recurso.
El otro gran atributo de SATAN está en sus guitarras; hablamos de un dúo muy añejo: Steve Ramsey y Russ Tippins; un dúo de gran arraigo que le ha dado a la banda una sólida identidad.
Cruel Magic condensa muy bien todos los atributos que hacen de SATAN una banda legendaria, con la particularidad de que ahora dan un paso al frente compositivamente.
Hay piezas como Legions Hellbound y Ophidian que muestran una intención de ir más allá de cantar encima de una consecución de riffs.
En el primer ejemplo han colocado muy buenos arreglos de guitarra encima de las líneas vocales, que le dan a la ejecución de Ross un aire distinto.
En el segundo ejemplo, aunque la pieza no es rápida, todos los instrumentos trabajan al servicio de Ross para que sus letras tengan más impacto.
Todo el tiempo es un deleite escuchar las guitarras de Ramsey y Tippins, se combinan en todos lados: en los intros, en los versos, en los puentes y nunca quedan mal.
Es difícil pensar en una banda tan añeja que mantenga su espíritu tan intacto; generalmente las bandas tienden a “evolucionar”, palabra utilizada para justificar un cambio de rumbo musical.
Lo que hace SATAN es interesante, pues el hecho de que hoy en día suenen tan bien habla de lo que adelantados que estaban a su época.
Curiosamente, el mismo Brian Ross no consideran a SATAN una banda de la NWOBHM; para él, pertenecen a una época posterior.