Felipe Andreoli cumplió 20 años con ANGRA y por tal motivo subió un video a su canal de YouTube narrando la historia de cómo Kiko Loureiro lo llamó y se terminó quedando con el puesto. Transcribimos y traducimos sus palabras.
Mira el video a continuación:
20 años con ANGRA
Este enero cumplo 20 años como bajista de ANGRA. Esto es algo un poco surreal para mí pero al mismo tiempo no creo haber pensado no estar en ANGRA todo este tiempo.
Muchos me preguntan si imaginé que llegaría así de lejos con una banda; no creo que lo pensara de esa forma; mi meta como miembro de una banda siempre ha sido dar lo mejor, crecer; pero no creo que haya contado los días, meses y años que he pasado viajando, dentro del estudio, en los ensayos, en conferencias de prensa, en entrevistas y con los fanáticos.
Todo pasa así, en un instante, y ya han pasado 20 años.
Tenía 20 años cuando me invitó Kiko (Loureiro) a la banda y fue de una manera muy poco esperada y rápida. Fue un cambio total; estaba en la escena under, tocaba en una banda llamada Karma, que era una banda de progresivo muy buena con la que lance dos discos que quiero mucho. El primero fue Inside the Eyes, tal vez un poco inmaduro pero con un poder seco; el segundo fue Leave Now, que para mí es un gran álbum.
En aquel entonces tocaba con Karma. Recién había tocado con Paul DI’Anno; puede que algunos no lo sepan, pero toqué y grabé con Paul Di’Anno; hicimos un disco llamado Nomad y, por cierto, ahí fue donde conocí a Aquiles (Priester); él fue uno de los que hablo de mí cuando ANGRA buscaba un bajista.
Como la mayoría de ustedes saben, en 1999 tres miembros se fueron de ANGRA: Andre (Matos), Luis (Mariutti) y Ricardo (Confessori); cantante, bajista y baterista. (Kiko y Rafael) decidieron seguir adelante, lo que para mí fue un movimiento muy valiente de su parte pues ya se habían ido tres y hallar a tres nuevos tipos para continuar con la banda era un movimiento muy valiente, ¡y lo hicieron!, y por eso estoy aquí hablando con ustedes.
Aparte de Aquiles, yo tenía muchos amigos en común con Kiko y Rafael; fuimos a la misma escuela de música; ellos fueron como maestros y yo como estudiante en el Conservatorio Souza Lima, que estaba cerca de donde vivía , ahí me la pasaba todo el tiempo ensayando, yendo a clínicas; tenían grandes clínicas: Steve Morse, Scott Henderson, Joe Zawinul, todos estaban ahí. Los llegué a ver algunas veces, pero no nos conocíamos, aunque muchos de los que me conocían les hablaban a ellos (Kiko y Rafael) acerca de mí.
No mandé ningún material, ni demos, ni videos; no los llamé, nunca hice ningún contacto para ser el nuevo bajista de ANGRA. Yo era feliz siendo el bajista de Karma en aquel entonces; estaba en la universidad estudiando administración y tenía una visión en mi mente de que tenía que hacer algo más aparte de la música por si ésta no me daba de comer.
Pero resulta que tantas personas les hablaron de mí a los chicos que terminaron llamándome. Consiguieron mi número, probablemente Aquiles se los dio, y un día me llamó Kiko. Dijo:
—Como probablemente sabes, ANGRA busca un bajista y me gustaría saber si quieres venir y hablar al respecto —le dije que sí y me dijo que fuera al día siguiente.
Fui a mi cuarto y pensé: “bueno, si voy a audicionar con ANGRA, mejor me aprendo una canción de ANGRA”, porque, por supuesto, conocía a la banda, ¿quién no la conoce en Brasil? Si eres un heavy en Brasil, conoces a ANGRA. Tenía Angels Cry, el único disco de ellos que tenía en ese entonces.
Lo puse, y la primera canción es Carry On. Bueno intenté aprenderla y rápidamente me di cuenta que no estaba preparado para tocarla porque es muy rápida durante un largo periodo de tiempo; es una canción muy rápida con muchas notas durante un tiempo extendido; necesitas stamina , no sólo técnica, ni estar preparado, ni saber cómo tocarla sino estar preparado para tocarla durante un largo periodo de tiempo y yo no podía.
Un minuto después de tocar ya estaba fatigado; mi brazo estaba cansado y pensé: “bueno, mañana me va ir muy mal”, porque no estaba preparado para tocar las canciones.
Sin embargo, no me pidió tocar ninguna canción, que era algo que yo pensaba que era buena idea hacer. Así que a la mañana siguiente tomé dos autobuses para ir a la casa de Kiko, porque no tenía carro en ese entonces; llegué a la casa de Kiko a la hora que me dijo.
La mayoría del tiempo hablamos y en un momento Kiko dijo si tocábamos un poco, y dije que sí. Él tenía un montón de pistas y eligió una; empezamos a tocar sobre esa pista haciendo ritmos, intercambiando solos durante unos diez minutos más o menos.
Cuando acabamos, dijo:
—¡Muy bien!, ¿pero puedes tocar las canciones de ANGRA? —y dije, “¡claro que sí puedo!”, totalmente consciente de que no podía.
Pero dijo:
—Está bien, puedes mostrarme un poco.
Así que le mostré un poco de mi técnica de tres dedos con mi mano derecha y dijo:
—Bueno, eso está bien pero tocas con tres dedos, ¿funciona? —le dije que sí; estaba muy intrigado por eso, de hecho, también me cuestionó por el bajo Ibanez que tenía, que es el mismo con el que grabé Rebirth, porque ya se había acostumbrado al bajo Music Man de Luis, y me dijo:
—¿Puedes conseguir un Music Man?
—¿Pero qué tiene de malo éste?, me gusta —le dije.
—Está bien, vamos a ver —dijo.
Dos días después tuve la llamada de Kiko dándome la bienvenida a la banda, lo que fue muy emocionante.
Y aquí un hecho interesante: entre ir a la casa de Kiko y recibir su llamada, hubo un día en medio, en ese día, fui a Souza Lima, y fui caminando porque no tenía carro y me tardaba 30 minutos en llegar.
Cuando crucé la avenida, en Brasil tenemos un mal comportamiento cuando los autos se detienen; es normal que la gente camine entre los autos; cuando hice eso, el semáforo cambió y los carros empezaron a moverse y uno de los carros no estaba prestando atención y casi me atropella; y cuando miro quién estaba dentro del carro, no pueden adivinar quién estaba conduciendo: Rafael Bittencourt. Llámenlo destino, como quieran, coincidencia, no sé qué fue pero al día siguiente fui invitado a la banda.
Mi vida cambió rápidamente; pasé de ser alguien con poca perspectiva en la industria musical a alguien que tocaba en una banda ya llevaba 10 años en aquel entonces, con personas que tenían mucha experiencia, que ya en ese momento eran conocidos y reconocidos en todo el mundo; que habían lanzado su último disco Fireworks, que fue un éxito en Europa y su gira fue enorme tocando en grandes lugares.
De repente llegamos tres tipos: Aquiles, que venía de Hangar, una banda under igual que Karma; Edu (Falaschi) que tenía a Symbols,, pero él era un poco más conocido, tenía un poco más de experiencia de la que yo tenía; y yo, con muy poca experiencia, solamente en Karma y con Paul Di’Anno tocando una pequeña gira.
No sabía nada sobre la música en general: disqueras, estudios, giras, backline, no sabía nada. Ni siquiera tenía un buen amplificador, así que Antonio (D. Pirani), que era el manager, me dio dinero para comprarme un amplificador; así que fui todo feliz a la calle de la música en Sao Paulo que se llama Teodoro Sampaio, que es muy conocida por sus tiendas de música, y compré un cabezal SWR con gabinete Gallien Krueger. Para eso me alcanzó el dinero que me habían dado, aunque era un buen equipo, no era ideal para escenarios grandes.
Yo, que apenas tenía poca experiencia, en apenas un mes ya estaba grabando en Alemania; girando por el mundo, en Japón, toda Europa, en Estados Unidos; toda Latinoamérica. Fui presentado como miembro de la banda el 7 de marzo de 2001, el mismo día que cumplí 21 años, fue un cumpleaños muy especial pues a medida que pasó el tiempo, desde que me uní a la banda, hasta cuando fui presentado como miembro oficial, empecé a ver todo lo que se decía de ANGRA y las expectativas sobre la nueva alineación; poco a poco me di cuenta del verdadero tamaño, de la verdadera importancia que tenía ANGRA, algo de lo que no era muy consciente antes, para ser honesto.
Y empezamos a hacer estos planes y se empezaron a materializar, como comprar los boletos a Alemania. Yo apenas si había salido de Brasil; mi única experiencia fuera de Brasil había sido en una ciudad en Argentina, a 20 kilómetros de la frontera; nunca había ido a Estados Unidos ni a ningún otro lado.
Compramos los boletos; todos esos planes de girar, qué equipo iba a usar; quién iba ser el productor; elegimos a Dennis Ward, que fue genial; hizo tres discos con nosotros, que fueron geniales, es una gran persona con la que se puede trabajar.
Mi vida cambió tanto en tan poco tiempo al unirme a ANGRA que me abrumé un poco. Generalmente soy un tipo con los pies en la tierra, pero debo confesar que pasar por todos estos cambios tan rápido me afectaron un poco la cabeza.
Así que durante la gira, que fue mi primera gira real con ANGRA,, porque la de Paul Di’Anno apenas si fueron siete fechas en comparación con cientos de fechas, empecé a ganar dinero y empecé a pensar: “bueno, como ya gano dinero, puedo comprar esto y lo otro; puedo comprar este auto, esa cosa, ese bajo”, y poco después de la gira me quedé sin dinero porque no tenía idea de cómo funcionaba la vida de los músicos.
Esa fue una gran lección para mí, que me tomó una gira más poderla entender por completo: que los músicos deben planear no sólo para la gira o durante la etapa en la que ganan dinero, que es la gira, sino que deben planear durante todo ese otro momento en el que no están haciendo nada con la banda, o mientras están escribiendo música, o en el estudio o sólo en ese tiempo entre terminar un disco e ir de gira; no tenía idea así que gasté todo mi dinero hasta que me quedé en bancarrota, lo cual no fue un gran problema porque vivía con mi mamá en ese entonces.
Tantas lecciones y cosas aprendí especialmente de Kiko y Rafael, porque ya eran más experimentados de lo que yo era, todavía hoy en día sigo aprendiendo de ellos muchísimo y aprendemos juntos.
Una de las cosas que se me quedaron es que necesitaba aprender este negocio de pies a cabeza, cada parte de él: disquera, promotores de conciertos, backline, salir de gira y todo lo que involucra tocar; planeación de un disco, todo.
Así que puse atención, en los siguientes 20 años puse mucha atención en cada paso del proceso y el resultado es que hoy en día, y desde hace muchos años, junto con Rafa, manejamos la banda; tenemos suficiente experiencia y conocimiento para manejar a la banda.
Puede que no seamos perfectos y puede que tengamos todavía muchas cosas por aprender, pero manejamos la banda. Y no es fácil manejar una banda de heavy metal en Brasil. Una banda de heavy ya es un reto; en Brasil el reto es mayor y aquí seguimos 20 años más tarde desde el día que me uní a la banda y 30 años después que se fundó por Rafael y Andre.
Durante los últimos días, a medida que se acercaba la fecha de los 20 años, durante los últimos meses, reflexioné mucho sobre las cosas que conseguí y las cosas que experimenté como miembro de ANGRA durante los últimos 20 años.
Como viajar alrededor del mundo y conocer países que jamás soñé conocer, como Japón, por ejemplo, que es uno de mis lugares favoritos para ir a tocar. He ido a Japón 11 veces y la mayoría de ellas con ANGRA o debido a ANGRA, aun cuando no voy con la banda, ya sea con Kiko. Todos esos países a los que he ido son surrealistas.
Los productores con los que he trabajado, Dennis , Jens Bogren, cada persona que he conocido, los miembros del staff que trabajan con nosotros, los amigos que he hecho alrededor del mundo, bandas que he visto tocar en vivo, conocer a sus miembros y hacerme amigo de gente que siempre había admirado.
Todas esas experiencias me hacen una mejor persona, alguien diferente de lo que habría sido si no hubiera pasado por estas experiencias.
Todo lo que he conseguido, a nivel personal: el departamento donde vivo, mi esposa, que conocí de alguna manera debido a ANGRA; la mayoría de mis amigos son músicos que conocí en gira, así que cambió mi vida y ha sido una gran parte de ella.
Estoy muy agradecido por todo el tiempo que he pasado con estos chicos en todas las alineaciones, todos los que han sido parte de la banda como músico, staff y managers con los que he trabajado.
Y especialmente a ustedes. Este viaje no habría así de divertido, entretenido y asombroso si no fuera por los fanáticos, ustedes, la gente que va a los conciertos, que compra los discos, las plateras, que comentan en línea, que tocan covers de las canciones, algo que para mí es asombroso: ver gente tocando mis líneas de bajo y subiendo videos y usándolas como herramientas para aprender y mejorar, para mí eso es increíble y cada vez que escucho a alguien decir: “toco el bajo por ti”, ese es el más grande cumplido que un artista puede recibir, en mi opinión.
Estoy muy feliz y orgulloso de mi viaje con ANGRA y de otros proyectos con Kiko, como 4action, además de otros proyectos que tengo y he tenido; influir para que la gente toque el bajo, para mí, es asombroso.
Ustedes han sido parte de mi vida durante los últimos 20 años, así que les agradezco a todos; algunos han estado conmigo desde el primer día que fue anunciada la alineación y estoy agradecido por eso, así que gracias.
Y gracias a todos aquí en el canal; puede que no sean fans de ANGRA, puede que estén más interesados en el bajo; tal vez tienen otros intereses en el canal, pero están aquí y eso significa mucho para mí.
Esto es sólo una pequeña reflexión de mis 20 años en ANGRA y vamos por otros 20 años, e incluso más; creo que todavía tengo mucha energía y la intención de seguir escribiendo música, mantener viva la llama. Espero que sigan conmigo los años en los que siga haciendo esto. Gracias. Nos vemos a la próxima.